lunes, 11 de octubre de 2010

El reflejo


Mi imagen en el espejo
¿Quien será esa
esa persona que se refleja en el?
No me reconozco
No reconozco  mi cuerpo mi piel 
Ni mi alma
El daño a araño todo
Me ha dejado una huella
Que es imposible borrar
Y hacen que todo
Sea oscuridad.

Ojala algún día sepa 
Donde estoy
Será el principio 
De mi largo caminar
Que me debe llegar 
A la felicidad
Esa que durante estos años
Solo e podido añorar

Pero es difícil 
Caminar sin pensar 
En que te espera al final
En que recompensa encontrarás
Y ahora no tengo nada
Por lo que merezca la pena andar.

Yo no se porque se me a dado este don
Esta vida
La que nunca había pedido
La que no me hubiera gustado conocer
Porque solo me hace sufrir.

Y ahora mis lágrimas caen
Sobre el papel 
Mientras escribo estas líneas
Que reflejan el estado de mi corazón
Ese que casi ya ni siento
Ese que esta muerto
Y deseando despertar
De ese sueño que tanto le a dañado
¿Quien reparara este dolor?

miércoles, 6 de octubre de 2010

El Laberinto de Ana ,Capitulo 1

La luz se filtraba por la ventana, entraba y se posaba sobre el cuerpo de Ana, que dormía sintiendo que en sus sueños era el único sitio donde se sentía bien.
Sus grandes ojos negros empezaron a abrirse la claridad entraba por ellos, mientras llegaba a su cabeza el primer pensamiento que cada mañana volaba por su cabeza, ¿Por qué? ¿Por qué estoy viva? Yo no quiero esta vida solo sufro, sufro y sufro. Intento alejar el pensamiento para poder afrontar el día, en ese mismo instante sonó el despertador. Tenia muchas cosas que hacer , y toda esa tristeza guardársela dentro como hacia siempre, parecer entera , una chica fuerte ,y que nadie supiera ese gran dolor que tenia dentro.
Salió de la ducha, el vahó llenaba el pequeño aseo .Se puso delante de el espejo y se miró.
Sus dos ojos negros aparecieron ante ella, sus facciones todavía de niña y su larga melena negra, se sentía fea, pese a que a los ojos de cualquier otra persona no lo era. Su metro 1.70, su perfecta figura de pechos perfectos y de piel suave, le hacían muy bella a los ojos de los demás. Pese a lo inmensamente bella que era y a sus 20 años nunca había tenido novio, ni siquiera un beso. Nunca había sentido ese algo por nadie o quizás su gran miedo a la gente a las personas lo que le hacia cortar cualquier intento de querer a alguien.
Ya vestida se dirigió a la habitación de su hermano, le miró era lo que mas quería en este mundo, lo que le hacia dejar ese dolor a un lado y luchar, luchar por el, para que tuviera una vida mejor que la suya y pudiera ser feliz, cosa que ella no había conseguido nunca.  Ana besó la frente de Marcos y este poco a poco se despertó .La miro con sus ojos azules saltones y esbozó una sonrisa que a ella la lleno de vida.
Marcos era un niño de ojos azules y pelo cobrizo, con una carita angelical que escondía muchas cosas. A sus 8 años todavía no hablaba, algo a lo que los médicos no daban explicación, salvo que fuese producto de un trauma, ya que no tenia ninguna enfermedad ni nada que le impidiese hacerlo. Aun con esto, era un niño muy vivo y maduro para su edad, muchos días cuando Ana no podía atenderle era capaz de despertarse, vestirse, desayunar e ir al colegio sin que nadie le dijese nada, tampoco salvo Ana había nadie que se encargarse de él.
 La madre de ambos, María  estaba pasando por una grave enfermedad y apenas se movía de su cama o del sofá. Se pasaba el día entre inmensos dolores y en un estado de semiinconsciencia producto de la medicación que la tenían como ausente. Pocos eran los momentos de lucidez de María pero en ellos, demostraba mucho amor por sus hijos y sufría mas en estos momentos al ver por lo que estaban pasando sus dos ángeles, como a ella le gustaba llamarlos, que en los momentos en que el dolor se apoderaba de ella.
Marcos demostraba en todo momento ser un niño fuerte, y no lloraba nunca pese a todo, parecía no temer nada, solo una cosa le hacia temblar, su padre. Le tenia pánico cuando este llegaba a casa, por las noches, Marcos se encerraba en su cuarto, y cuando le escuchaba pasar por el pasillo se escondía debajo de la cama, cogía fuertemente su mantita de la que no se separaba y entre temblores esperaba que pasara el momento y que el no entrase.
El miedo de Marcos era compresible, él solo había conocido a su padre Antonio como un hombre borracho, violento que pegaba a su madre y que algunas noches entraba en la habitación de Ana y le hacia lo que para el era daño, porque con 8 años todavía no entendía que era lo que realmente sucedía.
 No había conocido al hombre bueno, bondadoso y que adoraba a su hija, a su mujer y a ese futuro pequeñín que estaba dentro de esta cuando sucedió todo. Policía de profesión y de vocación, disfrutaba de su trabajo, le llenaba, le realizaba lo era todo para el. Hasta que un fatico día recibió un disparo, su pierna quedo maltrecha, no pudo nunca volver a trabajar. Después de media vida dedicada a ayudar a los demás siendo policía, solo recibió una placa, una pensión y una palmadita en la espalda. Cayo en una fuerte depresión , alcoholismo y se volvió un hombre súper violento, ni siquiera fue al nacimiento de su hijo Marcos, ni estuvo con su mujer en los momentos en que esta estaba muy enferma ,se convirtió en otro hombre, en otra persona que solo hacia daño y vagando como alma en pena . La peor parte se llevaba Ana, con María muy enferma apenas sin moverse de la cama, cargaba su violencia y su odio contra el mundo con su hija, las palizas se hicieron comunes,  y mas de una vez había entrado en la habitación de Ana por las noches y abusaba de ella, colmando así sus instintos más básicos y haciéndole vivir a ella un autentico infierno. Pese a todo lo que sufría Ana, por parte de el, en el fondo le quería, aun recordaba las tardes en que junto a el hacían puzles o cuando la ponía su gorra de policía y jugaba con ella, siempre colmándola de mimos y de cariño. Pensaba que algún día o en algún momento podría volver a ser el de siempre, el que la quería por encima de todo y que ella tanto necesitaba.
Ana vistió a Marcos, aunque este sabia hacerlo solo, ella le gustaba ser ella quien lo hiciera, y mientras lo hacia intentaba jugar con el, para que saliera alguna sonrisa, que tan difícil eran que salieran de su hermano. Solo cuando Ana , podía e ir a recogerle al colegio sonreía e iba corriendo a darle un gran abrazo, y los dos juntos hacían el camino a casa , sin soltarse de la mano, mientras ella le contaba cosas , le enseñaba los escaparates y intentaba sacar alguna palabra pero este nunca decía nada. Esos paseos con su hermana eran para Marcos los mejores momentos, en los que se sentía feliz, acostumbrado a hacer solo el camino del colegio a casa que fuese su hermana la que fuese a recogerle le colmaba de alegría.
Marcos desayuno, mientras Ana le preparaba la cartera y el almuerzo. Ya con todo listo se dispusieron a irse, no sin antes ir a la habitación de su madre, que dormía como siempre entre dolores y le dieron beso cada uno. Nunca salían de casa sin hacerlo, la querían mucho, pese a que siempre estaba ahí metida en la cama, pero era tanto el amor que demostraba tener por sus hijos en los ratos que estaba lucida que estos la adoraban.
Caminaron juntos hacia el colegio cogidos de la mano, mientras Marcos miraba con sus grandes ojos azules hacia los escaparates llenos de luces, a los perros que paseaban con sus dueños cerca de ellos, a los coches…Ana le miraba mientras con una mezcla de pena y rabia, era solo un niño , aunque se hiciera el fuerte y en muchos fuese independiente eso le daba pena pensar en la inocencia que estaba perdido Marcos tan rápidamente y que apenas le impedían disfrutar de su niñez, y rabia no sabia ante que o ante quien tenerla pero la sentía porque todo lo malo les pasaba a ellos.
Venga mi pequeñín dame un besito- le decía Ana en la puerta de colegio, mientras se agachaba y se ponía a su altura y Marcos se abrazo a ella y le dio un gran beso en la mejilla ,sus ojos se entristecieron , casi caían lagrimas de ellos, Ana se percato- Venga ves, que luego vengo a recogerte te lo prometo , ¡eso si con la condición de que te portes bien y tengas una gran sonrisa todo el día!-.La cara del pequeño cambio , haciendo un gesto afirmativo con la cabeza y sonriendo se fue se encamino hacia la puerta. Laura se quedo ahí mirándole hasta que Marcos entro en el colegio, y pensó que tenía que luchar con todas sus fuerzas, contra todo y contra todos para que su hermano fuese feliz.

martes, 5 de octubre de 2010

Arbol Caido

El árbol quiso crecer
ser el mas alto
para que los niños
jugaran en su regazo ,
los niños disfrutaban de su sombra
grande y hermosa .

ÁRBOL CAÍDO
VIDA PERDIDA

El quería que los pájaros
se posaran en sus brazos
estos, pasaban de largo
y se iban volando .

ÁRBOL CAÍDO
MUNDO PERDIDO

Al principio todo iba bien
sus hojas eran verdes ,
sus ramas muy fuertes
y las plantas de alrededor
lo admiraban por su esplendor.

ÁRBOL CAÍDO
ILUSIÓN PERDIDA.

Llego el calor
y con el la soledad
los niños no iban a jugar .
Estaba solo en su lugar ,
impasible ,
viendo a la gente pasar
sin mirale , ni sentarse
a escuchar
lo que el roble tenia que contar.

ÁRBOL CAÍDO
ESPERANZA PERDIDA

Se deprimió
sus gos se sacaron
y cayeron
su color se fue perdiendo .

ÁRBOL CAÍDO
MIRADA PERDIDA

Ahora los niños están tristesya no tienen donde jugar .
Los mayores del lugar
ya no tienen con quien hablar .
La ciudad esta triste ,
triste por que no esta
ese árbol que soñó con volar .